El armadillo transmite la lepra al hombre

Publish date: 2024-06-15

El armadillo puede transmitir la lepra al hombre. Así lo confirma un estudio donde se constata la infección por Mycobacterium leprae a un grupo de individuos que habían tenido contacto con armadillos. El estudio, realizado por científicos de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL), en Suiza, y por la Universidad Estatal de Luisiana, en Estados Unidos, aporta pruebas de la existencia de una nueva cepa de la micobacteria que ha emergido en el sur de Estados Unidos y que se ha transmitido a humanos por contacto con armadillos que tenían la enfermedad.

En Estados Unidos se registran tan solo 150 casos de lepra al año. La mayoría de las víctimas trabajan en áreas donde la enfermedad infecciosa es endémica, fuera del país. Sin embargo, las autoridades sanitarias se alarmaron cuando vieron que un tercio de los afectados anuales habían contraído la enfermedad sin salir de las fronteras.

La hipótesis de que podía haberse contraído por contacto con armadillos -los únicos animales conocidos, además del hombre, que pueden portar la bacteria causante de lepra- se confirmó a partir del análisis del ADN realizado con tecnología de vanguardia de la EPFL de las muestras obtenidas de los animales y de los individuos.

En el estudio se ha analizado a 33 armadillos de los que se sabía que presentaban la enfermedad y 50 pacientes con lepra. La cepa en cuestión fue identificada en 25 de los animales y en 22 pacientes. Estos afectados no habían viajado fuera de Estados Unidos pero sí vivían en zonas del país donde abundan los armadillos y, además, la cepa de M. leprae parecía prevalente. Por estas razones, los investigadores incluyeron en el trabajo que "el contacto directo frecuente con los armadillos, así como la preparación y consumo de su carne debe desaconsejarse". En el estudio también se sugiere la necesidad de controlar la expansión del animal.

Se desconoce la forma en que el armadillo contrae y desarrolla la lepra. La baja temperatura de su organismo (32ºC) hace de él un hospedador idóneo para una bacteria que vive en temperaturas de entre 30º y 32ºC, aunque se sospecha que haya otros factores implicados, como ciertas alteraciones en su sistema inmunológico.

La preferencia de la bacteria por las bajas temperaturas explica que generalmente infecte al hombre a través de las extremidades, más frías; más del 90 por ciento de los hombres que contraen la infección son capaces de eliminarla espontáneamente. 

- (N Engl J Med 2011; 364: 1.626-1.633).

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